Presentada como "La apasionante historia de dos familias que luchan por sobreponerse a su propio destino", Dispara, yo ya estoy muerto era una novela que tenía muchísimas ganas de leer por varias razones. Por un lado, aún no había encontrado hueco para Julia Navarro. Imperdonable, sí, pero mis ratos de lectura no llegan para todo lo que quisiera. Por otro lado, la historia me atraía, dos familias, una árabe y otra judía, unidas por el amor y la amistad y separadas por la religión. Y, por último, las reseñas y comentarios positivos que iba leyendo acerca de ella.
Así que, por fin, le hice hueco. Un hueco grande, eso sí. Y es que sus más de 900 páginas imponen.
Julia Navarro
Nacida en Madrid, en 1953, es periodista y ha trabajado a lo largo de su carrera en prensa, radio y televisión.
Es autora de los libros de actualidad política Nosotros, la transición; Entre Felipe y Aznar; La izquierda que viene y Señora presidenta. Con su primera novela, La Hermandad de la Sábana Santa, obtuvo un espectacular éxito y alcanzó los primeros puestos de ventas tanto en España como en el extranjero. Con sus siguientes novelas, La Biblia de Barro, La sangre de los inocentes y Dime quién soy, confirmó su éxito de público y crítica. Los cuatro títulos han vendido hasta la fecha más de tres millones y medio de ejemplares en todo el mundo y se han publicado en treinta países, entre ellos, Italia, Alemania, Portugal, Rusia, Corea, Japón, China, Reino Unido o Estados Unidos. Sus novelas han sido merecedoras de distintos galardones: Premio Qué Leer a la mejor novela española de 2004, VIII Premio de los lectores de Crisol, Premio Ciudad de Cartagena 2004, Premio Pluma de Plata de la Feria del Libro de Bilbao 2005, Premio Protagonistas de Literatura y Premio Más Que Música de los Libros 2006.
Dispara, yo ya estoy muerto.
Sinopsis:
Una extraordinaria novela de personajes inolvidables cuyas vidas se entrelazan con momentos clave de la Historia, desde finales del siglo XIX hasta mediados del XX, y que recrea la vida en ciudades tan emblemáticas como San Petersburgo, París o Jerusalén.
Dispara, yo ya estoy muerto es una historia llena de historias, una gran novela que esconde dentro muchas novelas, y que, desde su enigmático título hasta su inesperado final, alberga más de una sorpresa y emociones a flor de piel.
Mi lectura:
"Hay momentos en la vida en los que la única manera de salvarse a uno mismo es muriendo o matando". Con esta frase comienza Julia Navarro su novela, una frase que se repite varias veces a lo largo de la misma y que nos ayuda a entender su final.
Dispara, yo ya estoy muerto narra la historia de dos familias. Por un lado los Zucker, con Samuel, ruso con orígenes polacos y franceses, como protagonista y Ezequiel, su hijo, como narrador de la parte judía. Por otro lado, los Ziad, árabes palestinos.
Marian trabaja para una ONG. Se encuentra en Palestina para redactar un informe sobre los asentamientos judíos y, antes de hacerlo, quiere conocer también la versión judía. Para ello se reúne con Ezequiel y a través de varias entrevistas iremos conociendo la historia de las dos familias siendo ella misma quien nos cuente la de los Ziad, con quienes ya se ha reunido.
Pero no sólo eso. A la vez que nos sumerge en unas historias familiares emocionantes, Julia Navarro nos lleva de la mano a través de la Historia, desde la Rusia zarista de finales del siglo XIX a la actualidad, pasando, por supuesto, por la II Guerra Mundial, los campos de exterminio, los papeles que Francia e Inglaterra jugaron,... con un impresionante despliegue de personajes, a cual más interesante, y con un ingente trabajo de documentación. Nos cuenta la diáspora judía y la materialización del sueño de muchos de ellos: la creación del estado de Israel, lo que conllevó la pérdida de las tierras para los miles de árabes que previamente las habitaban.
Tengo que confesar que me costó un poco entrar en la novela pero, una vez que lo hice, no podía parar de leer. La autora ha hecho un trabajo inmenso de documentación y ha conseguido con gran acierto acoplar la historia de los Zucker y los Ziad a los acontecimientos y personajes reales a través de más de un siglo de Historia. Y así, a través de las dos familias conocemos el origen del conflicto entre judíos y palestinos. Si bien es cierto que, en ocasiones, la cantidad de datos históricos aportados llega a abrumar y a punto estás de coger un lápiz para hacer un esquema y no perderte.
Sin embargo, y esto es una impresión personal, la historia no me parece todo lo imparcial que pretende ser y se centra más en la parte judía. Nos presenta mucho más extensa y detalladamente el sufrimiento judío antes de llegar a conseguir el estado de Israel que el palestino tras los asentamientos y pérdida de sus tierras o de cómo muchos de ellos tuvieron que vivir o siguen viviendo en campos de refugiados.
A favor:
Ingente tarea de documentación
Buenos personajes
A pesar de abarcar un periodo tan largo el interés no decae
Perfecto encaje entre los personajes de la novela y los acontecimientos históricos
En contra:
En mi opinión, la historia no es todo lo objetiva que pretende ser.
La gran cantidad de datos históricos llegar a abrumar
Y, para cerrar mi opinión, recojo una frase de la novela: "¿Hasta cuándo vamos a permitir que la religión nos separe y provoque una mirada diferente de los unos hacia los otros?"
Ficha técnica:
Editorial Plaza&Janés. Colección Éxitos.
Fecha publicación 08/2013
912 páginas
ISBN: 9788401354694
Precio: Tapa dura con sobrecubierta: 22,90 €; epub: 11,99 €
En este enlace podéis leer el primer capítulo.
xxxxx Buena lectura
Lo voy a dejar para más adelante, porque de momento no me atrae lo suficiente, besotes y gracias por la reseña
ResponderEliminarJulia Navarro me gustó mucho en su época de La bíblia de barro, etc, pero sobre todo me di cuenta de lo que era capaz cuando leí: Dime quién soy.
ResponderEliminarTengo la novela en casa y como tu le tengo que hacer un hueco para empezar a leerla, aunque ganas no me faltan.
Ya me indica lo que voy a disfrutar de la lectura las frases que recoges.
Un saludo.
Buena pregunta final; deseando tenerla en casa para hacerla un hueco,
ResponderEliminarbesucus
A pesar de los peros, esta novela me llama mucho.
ResponderEliminarBesotes!!!
Me impone el grosor de la novela, pero creo que trata un tema que da para mucho; lástima que no sea del todo imparcial. 1beso!
ResponderEliminarSigo sin apuntarme esta novela y tus pero confirman mis dudas sobre la objetividad de esta novela. Un beso
ResponderEliminaryo también la tengo pendiente... tengo que buscar el ratito... mil besos
ResponderEliminarQué ganas de leerlo! Tengo un poco de miedo por la cantidad de datos históricos, que son además sobre un tema que yo desconozco, pero aún así creo que me va a gustar también.
ResponderEliminarA ver si me pongo con él.
Me llama mucho pero tengo aún pendiente La biblia de barro y dime quien soy.
ResponderEliminarUN beso!
A mi me ha decepcionado un poco. La he encontrado demasiado repetitiva, demasiado darle vueltas a lo mismo todo el rato. He de reconocer, sin embargo, que históricamente hablando es muy interesante. Me gustó muchísimo más Dime quien soy.
ResponderEliminarNo es que la novelista decida centrarse mas en el sufrimiento del pueblo judío. Es que, sin negar el sufrimiento de los árabes palestinos, hay mucho mas sufrimiento en la historia del pueblo judío, al menos hasta la creación del estado de Israel que es el periodo que básicamente abarca esta novela. No es cuestión de opinión, ahí están los hechos.
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